Que la madre gestante lleve una dieta saludable para evitar que le transmita alteraciones metabólicas a su bebé es la conclusión de un estudio realizado por la U. de Washington.
El estudio, La obesidad de la madre puede perjudicar la salud de sus descendientes durante varias generaciones, encontró que una dieta en las mujeres embarazadas con un alto contenido en grasas y azúcares, incluso antes de la gestación, puede perjudicar la salud no solo de los hijos, sino de las próximas generaciones, explicando que la obesidad de la madre y los problemas metabólicos asociados a esta enfermedad, se transmiten a través del ADN de las mitocondrias presentes en el óvulo no fertilizado. Algo que no sucede en el caso de que los padres padezcan estos trastornos, porque las mitocondrias solo se heredan de la mamá.
Es así como el estudio las invita a ellas a asesorarse sobre los alimentos que mejor les convengan durante esta etapa, previniendo con anticipación la obesidad del nuevo integrante de la familia, promoviendo en general los buenos hábitos nutricionales entre ellas.
Un estudio, liderado por la U. de California, en Estados Unidos, indica que la obesidad durante el embarazo también puede afectar el sistema inmunitario de los bebés.