Una emoción que todos buscan pero que cada quien escoge sentirla. Aquí algunos tips para ser más feliz en su día a día.
La felicidad no es un estado de ánimo que aparezca por sí solo. En realidad es un hábito que se puede fomentar, practicar y estimular a partir de acciones o pensamientos que ayuden a sentirse mejor. Es el sentimiento que indica que una persona está disfrutando de la vida y le ayuda a desarrollarse plenamente.
Existen personas que son felices por naturaleza, que tienen una personalidad alegre y optimista la mayoría del tiempo, independiente de que estén viviendo una buena o mala situación. Eso se da porque solo una pequeña parte de la felicidad (aproximadamente un 10%) depende de la situación en la que se encuentra una persona, de acuerdo con estudios de investigación reseñados por Kids Health.
Lo bueno es que la felicidad se puede trabajar y existen varios mecanismos para lograrlo. De esta forma es posible tener una mejor salud, optimizar sus relaciones con otras personas y hasta lograr más fácilmente la consecución de sus metas.
Estos son algunos consejos de la Clínica de Mayo al respecto:
- Dedicar más tiempo a la familia y a los amigos. Además, asegurarse de que esas personas sean felices y que irradien una actitud positiva.
- Hacer de la gratitud un hábito y expresarlo. Cuando se descubra teniendo un pensamiento ingrato, intente sustituirlo por uno de gratitud.
- Mantener una perspectiva optimista y no dejar que lo negativo tiña toda su perspectiva de la vida.
- Hallar un propósito, ya sea hacer trabajos de jardinería, cuidar a los niños o encontrar la espiritualidad, le hará más feliz que aquellas personas que no tienen aspiraciones.
- En vez de sentir nostalgia por el pasado o preocupación por el futuro, lo ideal es buscar oportunidades para disfrutar de los pequeños placeres de la vida cotidiana y enfocarse en lo positivo del momento presente.
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