A propósito del Día Mundial del Corazón que se conmemoró este mes de septiembre, un nuevo estudio realizado por la Universidad de Harvard, en Boston, aseguró que las bebidas que contienen azúcar añadida pueden afectar gravemente este órgano.

El reporte incluye las bebidas de frutas, las gaseosas y las energéticas, y señala que consumir una o dos porciones al día aumenta en un 35 por ciento el riesgo de sufrir un ataque cardíaco o de adquirir una enfermedad que puede llevar a la muerte.

Los científicos que participaron en el estudio fueron enfáticos en precisar que si bien las investigaciones que se habían hecho hasta ahora acerca del tema iban encaminadas a la importancia de reducir la grasa y el colesterol para proteger al corazón, ellos habían decidido incluir el tema del azúcar, debido a que las bebidas azucaradas representan la mitad de la glucosa añadida que consumimos a diario.

Además advirtieron que la fructosa, es decir, el azúcar que se encuentra en frutas y vegetales, es igual de problemática  para el corazón que la glucosa, la que se adiciona a bebidas y alimentos, lo que no solo afecta al corazón sino también al desarrollo de diabetes tipo 2.

«Para el cuerpo, no hay ninguna diferencia entre el azúcar inherente de un producto y el azúcar añadido a un producto. En ambos casos, el cuerpo las metaboliza de la misma forma», aseguró William Dermody Jr., vicepresidente de políticas de la Asociación Americana de Bebida, citado por Medlineplus.

Por supuesto, el estudio no atribuye los daños al corazón exclusivamente al azúcar añadido a las bebidas y consumido por nosotros, pero si indicaron que reducir o dejar de ingerirlas es un primer paso para cuidar la salud de este órgano vital.

La recomendación es prestar atención a las etiquetas que contienen las palabras dextrosa, sacarosa, melaza, azúcar, jarabe o jarabe de maíz alto en fructosa, que son azúcares añadidas. 

Una lata de gaseosa contiene al menos 35 gramos de azúcar, lo que equivale a nueve cucharadas pequeñas de glucosa (La Organziación Mundial de la Salud recomienda consumir 63 gramos de azúcar al día).